En la vida son muchas las cosas que
tenemos que hacer: formarnos lo mejor
posible en lo personal y en lo intelectual, encontrar un motor económico que pueda cubrir nuestras
necesidades, cuidar de nuestra familia y amigos,
dejar algún legado...
Todas las
actividades que son necesarias realizar a lo largo de nuestra vida, podemos
hacerlas con o sin ilusión.
El foco no es hacer sólo aquello que
nos gusta, sino poner la ilusión en cumplir con
nuestros compromisos y responsabilidades, porque cuando no existe
ningún tipo de compromiso con nada se acaba viviendo sin ganas y sin sentido.
Un ejemplo cinematográfico que me gusta especialmente, y que resume la
siguiente escena, es el comportamiento de George Bailey (James Stewart) en la magnífica
película ¡Que bello es vivir! :
Durante toda
su vida George no va a cesar de tener que luchar contra Potter y sus ansias por
arruinar la compañía de emprestitos, el mismo día de la boda de George, y
cuando este iba de luna de miel y por fin a salir de su odiada ciudad natal,
ocurre una crisis, que cierra el banco. La gente acude a la compañía de
emprestitosy el tío Billy, asustado, cierra las puertas, sabiendo que eso será
la quiebra. George abandona el taxi que le lleva a la estación y se enfrenta ante
sus asustados inversores. Pero el pánico por la miseria no se supera con
brillantes discursos y para contentar a sus inversores tiene que empeñar el
dinero que iba a gastar en su luna de miel. Apenas le sobran dos dólares, y no
podrá dejar Bedfordfalls.
También es
cierto que muchas veces falla la ilusión, pero cuando se esta dispuesto a hacer
lo que es correcto y echamos mano de la responsabilidad y del esfuerzo,
alcanzamos el mejor de los premios que un ser humano puede conquistar, la satisfacción personal de haber puesto lo mejor de uno
mismo, aún cuando el resultado no haya sido el deseado.
Estar dispuesto siempre a hacer lo que es correcto puede impedir llevar a cabo tus
sueños, como le sucede en la película a George Bailey, que tuvo el sueño de
dejar el mísero pueblo en que le había tocado vivir, viajar por todo el mundo y
estudiar una carrera universitaria, y nunca lo consiguió. Pero una de las
consecuencias del compromiso y la responsabilidad es que cuando las
dificultades te ahogan aparecen soluciones que nunca llegas ni a imaginar:
Entonces
llega tío Billy, y anuncia que un milagro ha sucedido, Mary ha hablado con
algunos amigos contándoles que George tenía problemas y toda la ciudad había
hecho una gran colecta, aparecen todos los que George ha ayudado durante toda
su vida y por los que se ha sacrificado dando todo lo que tienen para que
George pueda salir adelante, y finalmente aparece su hermano que al saber que
su hermano tenía problemas ha dejado plantado al presidente y ha volado bajo
una tormenta para estar junto a su hermano en aquellos momentos, y llega a
tiempo para brindar por su hermano, para él y para sus amigos, el hombre más
rico de la ciudad.
Conclusión:
1.- No seas
ingenuo, hay factores fuera de tu control que pueden impedir la consecución de
tus sueños, pero también pueden frustrarse cuando decides hacer lo correcto.
2.- Si te
guías en tu forma de actuar por el compromiso y la responsabilidad, siempre
ganas, cuanto menos tienes la satisfacción personal de haber hecho lo que
debías poniendo lo mejor de ti.
3.- No eres
perfecto (nadie lo es), pero tampoco es necesario para tener una vida completa
y bien vivida en la que puedas llegar a ser como George, el hombre más rico de
la ciudad.